Emma Maayan-Fanar, historiadora del arte, ha identificado en una iglesia abandonada de Israel la que sería una de las más antiguas representaciones pictóricas de Jesucristo, del siglo VI.
El templo, de estilo bizantino, se encuentra en las ruinas de Shivta, un antiguo pueblo agrícola en el corazón del desierto de Negev, a unos 40 kilómetros al suroeste de Be’er Sheva. El pueblo fue fundado en el siglo II y sobrevivió más de seiscientos años antes de ser abandonado durante el inicio del período islámico temprano.
«En contraste con la imagen occidental de Jesús como alguien con cabello largo y suelto y, a veces, barba, la pintura de Shivta lo muestra en estilo oriental con pelo corto y rizado, cara larga y nariz alargada”, afirma Maayan-Fanar, quien describe, junto a ese rostro, otro a su izquierda de mayores proporciones, muy probablemente de Juan el Bautista. Ambas figuras debieron de formar parte de una escena más amplia que fue pintada sobre la pila bautismal del templo.
El hallazgo, añade la investigadora, «fue realmente una cuestión de suerte y experiencia. Estudiamos el sitio, y yo estaba mirando de cerca el ábside esperando ver algunas manchas de color. Luego levanté la cabeza y vi los ojos. Era el rostro de Jesús en su bautismo, mirándonos. Dror Maayan, mi esposo y fotógrafo profesional, apuntó su cámara hacia la dirección en la que pensé que veía la imagen, y allí estaba, el rostro de Jesús».
La imagen hallada «pertenece al esquema iconográfico de un Cristo de pelo corto, que estaba especialmente extendido en Egipto y en Siro-Palestina, pero que pasó al arte bizantino posterior», recoge ACI Prensa.
El hallazgo ha sido publicado en la revista arqueológica Antiquity, de la Universidad de Cambridge, junto a los arqueólogos Ravit Linn, Yotam Tepper y el profesor Guy Baz-Oz, del Instituto de Arqueología Zinman de la Universidad de Haifa. Los autores de este estudio aseguran que “el rostro de Cristo en esta pintura es un descubrimiento importante en sí mismo».
Imágenes: Daily Mail.