Arqueólogos de la Universidad Hebrea de Jerusalén informaron recientemente de que había sido descubierta en el desierto de Judea (Israel) una antigua inscripción que parafraseaba los dos primeros versículos del salmo 86. Así lo recoge The Christian Post.
Según un comunicado de la universidad, el proyecto de excavación en la fortaleza de Hircania duró cuatro semanas y se llevó a cabo el pasado mes de mayo. En la esquina sureste se descubrió un tramo de una línea de fortificación que data aproximadamente del siglo I o II a. C.
En el idioma del Nuevo Testamento
En ese mismo lugar, los arqueólogos hallaron una piedra de gran tamaño con texto pintado en rojo y una cruz en la parte superior. La inscripción estaba escrita en griego koiné, el idioma en el que se escribió el Nuevo Testamento.
El texto fue descifrado por el epigrafista Avner Ecker, de la Universidad Bar-Ilan (Israel), quien asegura que es una paráfrasis del Salmo 86: 1–2 , también conocido como «oración de David». «Jesucristo, guárdame, porque soy pobre y necesitado», dice la inscripción. Los dos primeros versículos del salmo 86 dicen: «Escúchame, Señor, y respóndeme, porque soy pobre y necesitado. Guarda mi vida, porque te soy fiel».
Ecker comentó en un comunicado que el salmo 86 «era uno de los más comunes en la liturgia cristiana antigua«. El profesor Gutfeld dijo a The Washington Times que se trata de la primera vez que se descubre una frase antigua de los Salmos inscrita en una enorme piedra.
Puedes leer aquí el salmo 86 de la Biblia.
Ecker también apuntó a que «los errores de sintaxis cometidos en la transcripción» indican que el escritor «no hablaba griego como lengua materna, sino que era nativo de la zona, tal vez incluso local, y hablaba una lengua semítica«. Además del salmo, los investigadores descubrieron otra inscripción en el sitio, pero aún no ha sido descifrada.