El pasado 19 de enero, en el estand de Israel en Fitur tuvo lugar un pequeño homenaje a dos sacerdotes españoles, Valeriano Domínguez Toro y el padre Pedro González González. Ambos han conducido a Tierra Santa a cientos de grupos y miles de personas durante treinta años. En nombre del Ministerio de Turismo israeli, les entregaron los diplomas Dolores Pérez Fías y Sarah Salansky.
Decir misa en el Calvario
Nacido en 1960 en Badajoz, Valeriano Domínguez Toro peregrinó por primera vez a Tierra Santa con 26 años junto con un grupo de sacerdotes. "Esta experiencia vivida en Tierra Santa me cautivó para siempre", explicó: "Siendo un enamorado de las Sagradas Escrituras, conocer la tierra en la que se produjeron los grandes acontecimientos de la vida de Jesús fue, ha sido y es, un plus en mi vida”.
"Siempre lo he hecho como acompañante espiritual porque estoy convencido de que cuando uno conoce los santos lugares le resulta más fácil entender los textos bíblicos", afirmó.
Sin embargo, hasta el año pasado nunca había podido celebrar misa en el Calvario, una experiencia que recomienda a todos los sacerdotes: "Un sacerdote que haya estado en el Calvario nunca después vivirá la Semana Santa de la misma manera, porque a partir de ese momento siempre tendrá en su cabeza el entorno en el que ocurrió la Pasión".
Don Valeriano, actualmente párroco en la iglesia del Espíritu Santo en Cerro del Viento, en Badajoz, ha editado su propia guía de Tierra Santa y anima a ir allí a pesar de las noticias en ocasiones preocupantes: "Nunca he tenido miedo, siempre he animado a la gente a peregrinar", dijo al diario Hoy.
Teólogo y guía
Por su parte, Pedro González González estudió en Israel los últimos tres años de Teología, de 1970 a 1973, y allí se ordenó sacerdote como franciscano. En 1971 comenzó ya siendo guía con su primer grupo. En esos años se trataba de grandes barcos que llevaban a seiscientos peregrinos, y necesitaban muchos guías. Pedro fue uno de ellos, con sus recién cumplidos 25 años, justo antes de ordenarse sacerdote. Luego volvió a España, y desde 1975 al 2005 ha acompañado grupos todos los años a Israel. De 2005 a 2015 ha vivido en Madrid, en la basílica de San Francisco el Grande.
"Solía hacer una media de 12 a 16 grupos al año", rememora: "Mi récord fue el año 2010, cuando acompañé a 15 grupos". En total, el sacerdote calcula que ha acompañado a unos doscientos grupos a Tierra Santa.