Magdala se va a unir al Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, que se celebra en todo el mundo el mes de octubre, para sensibilizar a la población sobre la detección precoz, el tratamiento y los cuidados paliativos ante esta enfermedad.
El de mama es el quinto cáncer más común, y la primera causa de muerte por cáncer en las mujeres, 522.000 en 2012.
"Como un lugar que honra a todos las mujeres", informa Magdala Center, "nos sentimos responsables de apoyar a todas las mujeres y hombres que pasan por este desafío. Magdala quiere recordar todas las vidas de mujeres perdidas a consecuencia de este tipo de cáncer, y homenajear a todas aquellas que están luchando contra él".
En consecuencia, durante el próximo mes de octubre, se homenajeará y recordará en el Atrio de las Mujeres del templo Duc in Altum de Magdala Center a todas las mujeres que han dejado su huella como luchadoras y supervivientes: por su fortaleza, su belleza y su amor.
Se invitará a todas las personas que visiten el templo durante ese periodo para que se tomen un minuto para rezar por todas ellas en el pilar del Atrio, erigido en honor a todas las mujeres enraizadas en la fe. El significado de este rincón de la iglesia es resaltar la dignidad de la mujer, su fortaleza, su belleza, su elegancia y su influencia a lo largo de la historia, cualidades que sobresalen en las primeras mujeres que suguieron a Jesús.
Visita episcopal
Además de esta iniciativa, que Magdala Center difundirá entre sus seguidores de todo el mundo en las redes sociales para que se adhieran espiritualmente a ella, el centro fue este mes de septiembre objeto de una atención muy especial: la de los obispos de la Conferencia de Obipos de Europa, representantes de 45 países, reunida del 11 al 16 de septiembre por primera vez en Tierra Santa.
Como parte de los actos de la Conferencia, los obispos europeos celebraron una misa en el templo Duc in Altum: "Esto alegró enormemente al equipo de Magdala", afirma el blog de Magdala Center, "quienes pudieron contemplar así cómo Magdala está pasando, lenta pero firmemente, de la oscuridad y el anonimato a ser incluido entre los itinerarios cotidianos de los peregrinos que vienen a Tierra Santa".
"¡Queridos cardenales, obispos, sacerdotes y demás participantes, gracias por vuestra presencia y vuestras oraciones!", concluyen los responsables del complejo situado a orillas del lago Tiberíades.