El pasado 3 de agosto, el Patriarcado Latino de Jerusalén organizó una peregrinación a Roma para los ganadores del Concurso Bíblico en Nazaret, que finalizó el pasado 25 de marzo. En la delegación que partió desde Tierra Santa estuvieron presentes el Vicario Patriarcal para Israel, Mons. Rafiq Nahra, y por el párroco de Nazaret, responsable del concurso, el P. Marwan Dadis, junto con los ganadores de las últimas tres ediciones.
Este concurso bíblico se lleva a cabo cada año en colaboración con el Club de la Familia de la Anunciación Latina y con el apoyo de las diócesis cristianas occidentales y orientales y de instituciones cristianas locales y extranjeras.
El concurso está formado por 18 etapas, en las que participan obispos de todas las iglesias y concluye con la participación del Patriarca Latino de Jerusalén, Mons. Pierbattista Pizzaballa.
Desde 2012 se han realizado cinco ediciones: cuatro dirigidas a personas de 10 a 35 años y dos reservadas a mayores de 35 años.
La sexta edición, que finalizó el 25 de marzo, estuvo dirigida a los jóvenes. Estos últimos compitieron durante más de tres horas frente a tres jueces; dos sacerdotes y una religiosa. Cada participante tuvo que pasar por tres intentos y se calificó en función de su desempeño después de cada uno. La primera prueba consistía en contar una parte exacta de la Biblia, la segunda en adivinar la identidad de un personaje bíblico y la tercera en contestar una serie de preguntas capciosas con verdadero o falso.
«Esta iniciativa ha dado a conocer la Biblia no solo a nuestros jóvenes, sino también a las familias y los padres”, dijo Monseñor Pizzaballa durante su discurso de apertura de este último concurso. «Solo puedo expresar mi agradecimiento a un proyecto así, y a todos aquellos que nos permiten conocer mejor nuestras raíces cristianas aquí, en Tierra Santa. Sobre todo porque iniciativas de este tipo suelen venir de nuestros sacerdotes… pero esta vez se trata de miembros de nuestras comunidades quienes nos empujaron a montar un proyecto así. Lo cual está muy bien -deberían hacerlo más a menudo-, agregó, antes de agradecer a todos los organizadores y concluir con una bendición final.
Los ganadores pueden disfrutar de una peregrinación al Vaticano, durante la que se encuentran con el Papa.
Debido a la pandemia, los ganadores del concurso de los dos años anteriores no habían podido viajar a Roma por lo que, en esta ocasión, la peregrinación estuvo compuesta por los ganadores de los tres años, quienes fueron acompañados por sus familiares.
Según informó el Patriarcado Latino de Jerusalén, el grupo asistió también a la Audiencia General del Papa Francisco en el Vaticano el miércoles 3 de agosto en el que el Santo Padre «destacó la importancia y el papel de la competición para reforzar el espíritu y las enseñanzas de los Santos Evangelios entre los hijos e hijas de Tierra Santa».