Basma es una joven cristiana palestina de Belén. Sufre de un síndrome, una enfermedad poco conocida, que le ha deformado la cara y el cuerpo. Pero con sus manos crea objetos bellos que nos hablan de Navidad, de Belén, de la Sagrada Familia, del Niño Dios…
Basma comenzó a trabajar con terracota cuando era niña y desde entonces no ha parado. Crea formas delicadas y armoniosas y las pinta. «Sus ojos, ahuecados por el síndrome, brillan con pasión y creatividad», cuenta la web de la Custodia franciscana de Tierra Santa.
Una mujer emprendedora: no es frecuente en Palestina
En la sociedad palestina ni las mujeres ni los discapacitados tienen mucho margen de maniobra. Pero Basma, antes de la guerra de Gaza, consiguió, con constancia, consolidar su negocio artesanal.
«No es normal que las mujeres trabajen aquí en Belén. O mejor dicho, solo se ha convertido en algo normal en los últimos tiempos difíciles desde el punto de vista económico», comenta. Siendo una sociedad mayoritariamente musulmana, es difícil para una chica hacerse oír. En entornos cristianos las mujeres tienen mucho más espacio.
«He tenido una pasión por la terracota desde que era niña. No recuerdo cómo nació, simplemente siempre ha estado conmigo. Lo más importante fue el amor y el apoyo de mi familia que siempre me hizo sentir aceptada y me permitió estudiar esta disciplina», explica.
Basma habla muy bien el italiano, lo estudió en la escuela de Belén y visitó Italia varias veces para aprender técnicas artesanales. «Al principio yo no tenía clientes, pero poco a poco la gente empezó a fijarse en mí. Un punto de inflexión fue el Bazar Pro Terra Sancta, que comenzó a comprar mis productos y a revenderlos en su tienda online», comenta.
Apoyar a los artesanos en una Belén sin peregrinos
Muchos cristianos de Belén viven de artesanías que venden a los peregrinos. Pero la guerra de Gaza ha cerrado el flujo de peregrinos y los negocios artesanos corren riesgo de hundirse por completo.
La Custodia franciscana, a través de iniciativas de la Asociación Pro Terra Sancta, intenta apoyar a los artesanos con su Bazar de Comercio Justo, una de las pocas tiendas en Belén que también tiene una tienda en línea para apoyar a algunos de los comerciantes de la ciudad.
Pro Terra Sancta también apoya un centro de día fundado en 2009 que acoge a jóvenes con discapacidad y les ofrece trabajar en un entorno protegido, bien haciendo pequeños objetos artesanos de lana o trabajando como camareros en la casa de huéspedes de Arché. Los jóvenes descubren que su tiempo y sus vidas tienen valor. Pero con la pandemia primero y con la guerra después, las ventas y servicios bajaron y cuesta cubrir sus gastos.
De nuevo, Pro Terra Sancta intenta dar visibilidad a los productos dentro del bazar solidario de Dar Al-Majus (el Hostal de los Reyes Magos, que acoge muchos peregrinos en tiempos de paz) y también con los donativos de gente que quiere ser generosa con los paisanos de Jesús, los cristianos que viven donde Él llegó al mundo.
Para empezar a ayudar a los cristianos de Belén con Pro Terra Sancta, haga clic aquí.